Justificación - Santificación

Isa. 27:5; Jer. 33:3; Amós 3:3; Isa. 12:2

1 Cor. 1:30

Sal. 139:23-24

Efe. 2:8-9; Rom. 3:24,28; Rom. 5:1; Gal. 3:11; Juan 3:16;

2Cor. 3:18; Gal. 3:5,14; Heb. 12:14; Rom. 6:22; Heb. 12:4; 1 Tes. 4:3-4,7-8; 2 Tes. 2:13; 1 Pedro 1:16,22; 1 Pedro 2:9-10; 1 Juan 2:3-4; 1 Juan 3:3-6; Judas 24; Juan 17:17.

1 Juan 5:11-12; Juan 6:48,51; Juan 8:12,32; Juan 10:9; Juan 14:6,21; Juan 16:8; Juan 17:3; Salmo 51:10; Eze. 36:26-27; Jer. 29:12-13.

Ver trabajos específicos sobre el tema en http://www.fortunecity.com/victorian/twain/1024/:

1.- ¿Cómo vivió Cristo? Dennis Priebe; 7 páginas.

2.- La Imposibilidad del Hombre la Posibilidad de Dios; Dennis Priebe; 8 páginas.

3.- ¿Debiera ser adicionada la doctrina del pecado original...? Dr. Ralph Larson; 10 páginas.

4.- Manto de Justicia; Erwin Gane; 9 páginas.

5.- La Dinámica de la Salvación, Conferencia General; 28 páginas.

6.- Entrega, Conversión, Salvación; Dr. Morris Venden; 21 páginas.

7.- ¿Qué es pecado? Dennis Priebe; 6 páginas.

8.- ¿Qué es pecado? Thomas Davis; 1 página.

9.- ¿Qué es pecado? Erwin Eulner; 3 páginas.

10.- El pecado oculto; Ellen White, 2 páginas.

11.- El hombre por sí mismo es valorado, Hellen Bond; 5 páginas.

Ver trabajos específicos sobre el tema en http://www.fortunecity.com/victorian/twain/1024/:

1.- La naturaleza de Cristo durante la encarnación, Ministry 1972, 10 páginas.

2.- ¿Cómo pudo Jesús ser un niño sin pecado? Robert Wieland, 16 páginas.

3.- Cartas a las iglesias, M. L. Andreasen, 31 páginas.

4.- La encarnación, Ellen White, 6 páginas.

5.- ¿Qué naturaleza humana tomó Cristo? Caída, Herbert Douglass, 8 páginas.

6.- La naturaleza humana de Cristo, Antolin Diestre Gil, 34 páginas.

7.- La naturaleza humana de Cristo, Erwin Eulner, 7 páginas.

8.- La Palabra se hizo carne, Dr. Ralph Larson, 365 páginas (en proceso de traducción)

"Despertad a la justicia, y no pequéis; porque algunos no tienen el conocimiento de Dios: para vergüenza vuestra hablo". 1 Cor. 15:34.

"Cristo no murió por vosotros para que podáis las pasiones, los gustos y los hábitos de los hombres del mundo". TM:441.

"El cual Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos a los pecados, vivamos a la justicia". 1 Pedro 2:24.

"Por lo tanto, nuestros pecados de egoísmo, de carácter inamistoso, de indolencia, de malos hábitos y malas prácticas, deben ser eliminados positiva y firmemente. El que se desliga de Satanás no debe dar lugar a sus tentaciones. Consideren las almas que van a Cristo que Él es quien lleva los pecados... Que el alma arrepentida se aferre por fe del recurso preparado para salvarla no en sus pecados sino de sus pecados". 7CBA:952.

"Y sabéis que Él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en Él. Cualquiera que permanece en Él, no peca; cualquiera que peca, no le ha visto, ni le ha conocido. Hijitos, no os engañe ninguno: el que hace justicia, es justo, como Él también es justo. El que hace pecado, es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. Cualquiera que es nacido de Dios, no hace pecado, porque su simiente está en Él; y no pude pecar, porque es nacido de Dios". 1 Juan 3:5-9.

"A todo el que se rinda plenamente a Dios se le otorga el privilegio de vivir sin pecado, en obediencia a la ley del cielo". Review and Herald, 27-09-1906.

"El Salvador llevó sobre Sí los achaques de la humanidad y vivió una vida sin pecado, para que los hombres no teman que la flaqueza de la naturaleza humana les impida vencer. Cristo vino para hacernos "participantes de la naturaleza divina", y Su vida es una afirmación de que la humanidad, en combinación con la divinidad, no peca". MC:136.

"Sabemos que cualquiera que es nacido de Dios, no peca; mas el que es engendrado de Dios, se guarda a sí mismo, y el maligno no le toca". 1 Juan 5:18.

"El hombre caído es el cautivo legítimo de Satanás. La misión de Cristo consistió en rescatarlo del poder de su gran adversario. El hombre se inclina por naturaleza a seguir las sugerencias de Satanás, y no puede resistir con éxito a un enemigo tan terrible, a menos que Cristo, el poderoso Conquistador, more en él, guíe sus deseos y le fortalezca. Dios sólo puede limitar el poder de Satanás". 1JT:117.

"Pues tú, hijo mío, sé fuerte en la gracia que es en Cristo Jesús". 2 Tim. 2:1.

"El plan de redención contempla nuestro completo rescate del poder de Satanás. Cristo siempre separa del pecado al alma contrita. Vino para destruir las obras del diablo, y ha hecho provisión para que el Espíritu Santo sea impartido a toda alma arrepentida, para guardarla de pecar.

La intervención del tentador no ha de ser tenida por excusa para cometer una mala acción, Satanás se alegra cuando oye a los que profesan seguir a Cristo buscando excusas por su deformidad de carácter. Son estas excusas las que inducen a pecar. No hay disculpa para el pecado. Un temperamento santo, una vida semejante a la de Cristo, es accesible para todo hijo de Dios arrepentido y creyente". DTG:277-278.

"Quien no tiene suficiente fe en Cristo para creer que Él lo puede guardar de pecar, no tiene la fe que le dará la entrada al reino de Dios". Review and Herald, 10-03-1904.

"Muchos de los que profesan la fe no saben lo que es la verdadera conversión. No tienen experiencia en la comunión con el Padre a través de Jesucristo, y nunca han sentido el poder de la gracia divina santificando el corazón. Orando y pecando, pecando y orando, sus vidas están llenas de malicia, engaño, envidia, celos y amor propio. Las oraciones de los de esta clase son una abominación para Dios. La oración verdadera compromete las energías del alma y afecta la vida". 4T:534-535.

"Todo fracaso de los hijos de Dios se debe a la falta de fe". PP:712-713.

"Ni aun las mayores tentaciones pueden excusar el pecado. Por intensa que sea la presión ejercida sobre el alma, la transgresión es siempre un acto nuestro. No puede la tierra ni el infierno obligar a nadie a que haga el mal. Satanás nos ataca en nuestros puntos débiles, pero no es preciso que nos venza. Por severo o inesperado que sea el asalto, Dios ha provisto ayuda para nosotros, y mediante Su poder podemos ser vencedores". PP:446.

"Yo puedo todas las cosas a través de Cristo que me fortalece". Fil. 4:13.

"Jesús vino para traer un poder moral que se combine con el esfuerzo humano, y en ningún caso sus seguidores deben tomarse la libertad de perder de vista a Cristo, que es su ejemplo en todas las cosas". 1MS:306-307.

"Venció con la naturaleza humana dependiendo de Dios para su poder. Este es el privilegio de todos. Nuestra victoria será en proporción a nuestra fe". 5CBA:1083.

"La abnegación y la cruz se encuentran directamente en el camino de cada seguidor de Cristo. La cruz es lo que se opone a los afectos naturales y a la voluntad. Si el corazón no está completamente dedicado a Dios, si la voluntad, los afectos y los pensamientos no son puestos en sujeción a la voluntad de Dios, se fracasará en cumplir los principios de la verdadera religión y en ejemplificar en la vida la vida de Cristo". 2T:575.

"No podéis servir al yo y al mismo tiempo ser siervos de Cristo". 2T:117.

"El yo interpone sus deseos para que estén primero; pero el Señor reclama todo el corazón, la plenitud de los afectos. Él no entrará como segundo". 6T:103.

"La guerra contra nosotros mismos es la batalla más grande que jamás hayamos tenido. El rendirse a sí mismo, entregando todo a la voluntad de Dios, requiere una lucha; mas para que el alma sea renovada en santidad, debe someterse antes a Dios". CC:43.

"¿Estamos dispuestos a pagar el precio de la vida eterna? ¿Estamos dispuestos a sentarnos y a contar el costo, si el cielo vale la pena de un sacrificio tal como la muerte al yo y dejar que nuestra voluntad se doblegue y se modele en perfecta conformidad con la voluntad de Dios? Hasta que esto no ocurra, no experimentaremos en nosotros la gracia transformadora de Dios". ELC:155.

"El yugo y la cruz son símbolos que representan una misma cosa: la entrega de la voluntad a Dios. Cuando el hombre limitado lleva el yugo, se une en compañerismo con el amado Hijo de Dios. Cuando toma la cruz, el egoísmo se elimina del alma, y el hombre queda en condiciones de aprender a llevar las cargas de Cristo. No podemos seguir a Cristo sin llevar Su yugo, sin llevar Su cruz y seguirlo". 5CBA:1066.

"Cuando renuncies a tu voluntad propia, a tu sabiduría propia y aprendas de Cristo, hallarás admisión en el reino de Dios. Él requiere una entrega entera y sin reservas. Entrégale tu vida para que Él la ordene, modele y disponga. Toma Su yugo sobre tu cuello. Sométete para ser guiado y enseñado por Él.

En el momento en que el yugo de Él se ajuste en tu cuello, en ese mismo momento se nota que es fácil. Entonces se pueden efectuar los trabajos espirituales más pesados, se pueden llevar las cargas espirituales más difíciles, porque el Señor da el vigor y el poder, y da alegría para hacer la obra". 1MS:129-130.

"Vuestra única seguridad está en venir a Cristo, y en cesar de pecar en este mismo momento. La dulce voz de misericordia resuena en vuestros oídos hoy, pero, ¿quién puede decir si resonará mañana?". Signs of the Times, 29-08-1892.

"La cruz se halla en la intercesión de dos caminos. Uno es el camino de la obediencia que conduce al cielo. El otro conduce al camino ancho por donde el hombre puede caminar fácilmente con su carga de pecado y maldad, pero lleva a la perdición". 5CBA:1071.

"El insulto máximo que podemos propinarle es que digamos ser sus discípulos, a la vez que manifestamos el espíritu de Satanás en nuestras palabras, en nuestro modo de ser y en nuestras acciones". 3CBA:1178.

"Debemos mirar a Cristo; debemos resistir como Él resistió; orar como Él oró; agonizar como Él agonizó, si hemos de vencer como Él venció". AFDC:36.

"No había en Él nada que respondiera a los sofismas de Satanás. Él no consintió en pecar. Ni siquiera por un pensamiento cedió a la tentación. Así también podemos hacer nosotros". DTG:98-99.

"Por medio de la fe y la oración todos pueden cumplir los requisitos del Evangelio. Nadie puede ser forzado a transgredir. Primero tiene que ganarse el consentimiento propio; el alma tiene que proponerse cometer el acto pecaminoso antes que la pasión pueda dominar la razón o que la iniquidad triunfe sobre la conciencia. No importa cuán fuerte sea la tentación, no es excusa para el pecado". 5T:165-166.

"Satanás gobierna toda mente que no se halla en forma decidida bajo el control del Espíritu de Dios". TM:79.

"Descansa totalmente sobre el hombre mismo el probar si él se manejará a sí mismo, lo cual significa que Satanás lo manejará, o si será manejado por el Espíritu Santo". TM:288.

"Cuando se oye la primera insinuación al mal, elevad una oración al cielo, y después resistid firmemente la tentación". 3CBA:1173.

"Nuestro peligro principal está en tener la mente apartada de Cristo. El nombre de Jesús tiene poder para repeler las tentaciones de Satanás y levantar a favor nuestro una bandera contra él". 4T:357.

"Está usted venciendo, o está siendo vencido por su propia concupiscencia, apetitos y pasiones?". 5T:482.

"La vida cristiana es una vida de entrega diaria, de sumisión y de triunfo continuo". 4CBA:1176.

"No os sentéis en la silla de reposo de Satanás, ni digáis que no hay caso, que no podéis cesar de pecar, que no hay poder en vosotros para vencer. No hay poder en vosotros separados de Cristo, pero vuestro privilegio es tener a Cristo morando en vuestro corazón por la fe, y Él puede vencer el pecado en vosotros, cuando cooperéis con los esfuerzos de Él". NEV:76.

"Hay pensamientos y sentimientos sugeridos y suscitados por Satanás que molestan aun a los mejores hombres; pero si éstos no son albergados, si se los rechaza como odiosos, el alma no se contamina con la culpa, y nadie más es manchado por la influencia de ellos". Review and Herald, 27-03-1888.

"Para no cometer pecado, tenemos que resistir sus mismos comienzos, todo afecto y pasión han de sujetarse a la razón y a la conciencia. Todo pensamiento no santificado debe ser repelido de inmediato". 5T:165.

"La única defensa contra el mal consiste en que Cristo more en el corazón por la fe en Su justicia. A menos que estemos vitalmente relacionados con Dios, no podremos resistir los efectos profanos del amor propio, de la complacencia propia y de la tentación a pecar. Podemos dejar muchas malas costumbres y momentáneamente separarnos de Satanás; pero sin una relación vital con Dios por nuestra entrega a Él momento tras momento, seremos vencidos. Sin un conocimiento personal de Cristo y una continua comunión, estamos a la merced del enemigo, y al fin haremos lo que nos ordene". DTG:291.

"Por medio de la voluntad, el pecado retiene su dominio sobre nosotros". DMJ:55.

"El tentado necesita comprender la verdadera fuerza de la voluntad. Ella es el poder gobernante en la naturaleza del hombre, la facultad de decidir y elegir. Todo depende de la acción correcta de la voluntad. El desear lo bueno y lo puro es justo; pero si no hacemos más que desear, de nada sirve. Muchos se arruinarán mientras esperan y desean vencer sus malas inclinaciones. No someten su voluntad a Dios. No escogen servirle.

Dios nos ha dado la facultad de elección; a nosotros nos toca ejercitarla. No podemos cambiar nuestros corazones ni dirigir nuestros pensamientos, impulsos y afectos. No podemos hacernos puros, propios para el servicio de Dios. Pero sí podemos escoger el servir a Dios; podemos entregarle nuestra voluntad, y entonces Él obrará en nosotros el querer y el hacer según Su buena voluntad. Así toda nuestra naturaleza se someterá a la dirección de Cristo.

Mediante el debido uso de la voluntad, cambiará enteramente la conducta. Al someter nuestra voluntad a Cristo, nos aliamos con el poder divino. Recibimos fuerza de lo alto para mantenernos firmes. Una vida pura y noble, de victoria sobre nuestros apetitos y pasiones, es posible para todo el que une su débil y vacilante voluntad a la omnipotente e invariable voluntad de Dios". MC:131-132.

"Es sólo por medio de una unión personal con Cristo, de una comunión diaria, a cada hora con Él, que podremos llevar los frutos del Espíritu Santo". 5T:45-46.

"Toda verdadera obediencia proviene del corazón. La de Cristo procedía del corazón. Y si nosotros consentimos, se identificará de tal manera con nuestros pensamientos y fines, amoldará de tal manera nuestro corazón y mente en conformidad con Su voluntad, que cuando le obedezcamos estaremos tan sólo ejecutando nuestros propios impulsos. La voluntad, refinada y santificada, hallará su más alto deleite en servirle. Cuando conozcamos a Dios como es nuestro privilegio conocerle, nuestra vida será una vida de continua obediencia". DTG:621.

"Cuando vivamos por la fe en el Hijo de Dios, los frutos del Espíritu se verán en nuestra vida; no faltará uno solo...". DTG:630.

"Que el Señor nos dé poder para crucificar el yo y para nacer de nuevo, a fin de que Cristo pueda vivir en nosotros como principio vivo, activo, capaz de mantenernos en la santidad". 9T:151.

"Cuando un alma recibe a Cristo, recibe poder para vivir la vida de Cristo". PVGM:255.

"El evangelio no ha de ser presentado como una teoría sin vida, sino como una fuerza viva para cambiar la vida. Dios desea que los que reciben Su gracia sean testigos de Su poder". DTG:766.

"La justicia de Cristo no es un manto para cubrir pecados que no han sido confesados ni abandonados; es un principio de vida que transforma el carácter y rige la conducta. La santidad es integridad para con Dios: es la entrega total del corazón y la vida para que revelen los principios del cielo". DTG:509.

"Dios no envía mensajeros para que adulen al pecador. No da mensajes de paz para arrullar en una seguridad fatal a los que no están santificados. Impone pesadas cargas a la conciencia del que hace mal, y atraviesa el alma con flechas de convicción. Los ángeles ministradores le presentan los temibles juicios de Dios para ahondar el sentido de su necesidad, e impulsarle a clamar: "¿Qué debo hacer para ser salvo"?". DTG:79.

"Quisiera que entendáis nítidamente este punto: que a las almas se les impide obedecer la verdad por una confusión de ideas, y también porque no saben cómo entregar su voluntad y su mente a Jesús. Necesitan instrucción especial en cuanto a cómo llegar a ser cristianos". Ev:115.

"Vi que muchos descuidaban la preparación necesaria, esperando que el tiempo de "refrigerio" y la "lluvia tardía" los preparase para sostenerse en el día del Señor y vivir en Su presencia. ¡Oh! ¡y a cuántos vi sin amparo en el tiempo de angustia!

Muchos se están engañando al creer que el carácter será transformado cuando venga Cristo; pero cuando Él aparezca no se convertirán los corazones. Tendremos que habernos arrepentido de nuestros defectos de carácter y tendremos que haberlos vencido por la gracia de Cristo durante el tiempo de gracia. Aquí es donde debemos prepararnos para formar parte de la familia celestial". HAd:288.

"Si os habéis convertido en extraños y no habéis sido cristianos de acuerdo con la Biblia, convertíos; porque el carácter que adquiráis durante el tiempo de gracia será el carácter que tendréis cuando venga Cristo. Si queréis ser santos en el cielo, debéis ser santos primero en la tierra. Los rasgos de carácter que cultivéis en la vida no serán cambiados por la muerte ni por la resurrección. Saldréis de la tumba con la misma disposición que manifestasteis en vuestro hogar y en la sociedad. Jesús no cambia nuestro carácter al venir. La obra de transformación debe hacer ahora. Nuestra vida diaria determina nuestro destino". HAd:12.

"Se decidirá el destino de todos. Unos pocos, sí, sólo unos pocos de entre el gran número de habitantes de la tierra serán salvados para vida eterna, mientras que las masas que no han perfeccionado sus almas en la obediencia de la verdad serán destinadas a la segunda muerte". 2T:358.

"El que busca la verdad comprende la perfección de los principios de la ley de Dios al contemplar a Cristo con el propósito de ser como Él, y se siente insatisfecho con todo lo que no sea la perfección. Ocultando su vida en la vida de Cristo, ve que la santidad de la ley divina se revela en el carácter de Cristo, y fervientemente se esfuerza más y más por ser como Él. En cualquier momento puede esperarse una lucha, pues el tentador ve que está perdiendo a uno de sus súbditos. Debe librarse una batalla contra los atributos que Satanás ha estado perfeccionando para su propio uso. El instrumento humano ve contra qué tiene que luchar: un poder extraño opuesto a la idea de obtener la perfección que Cristo ofrece; pero con Cristo hay poder salvador que ganará para el agente humano la victoria en el conflicto. El Salvador lo fortalecerá y ayudará cuando suplique en busca de gracia y eficacia". 6T: 1098; 7A: 320; MS 89, 1903.

"Dios puede usar cada persona exactamente en la proporción en que puede introducir Su Espíritu en el templo del alma". La Maravillosa Gracia de Dios: 265.

"El pueblo de Dios debe estar bien despierto, no confiando en su propia sabiduría, sino totalmente en la sabiduría de su Líder. Deben apartar días para el ayuno y la oración". 3MS: 474.

"Asegúrese cada alma – cualquiera que sea su esfera de acción – de que la verdad esté implantada en el corazón por el poder del Espíritu de Dios. A menos que esto se asegure, los que predican la Palabra traicionarán el sagrado cometido". 3MS: 470.

"Quien trata de alcanzar el cielo por sus propias obras, guardando la ley, trata una imposibilidad. El hombre no puede salvarse sin la obediencia, pero sus obras no deben provenir de sí mismo. Cristo debe operar en él el querer y el efectuar, según Su buena voluntad". La Maravillosa Gracia de Dios: 175.

"Justicia es obediencia a la ley. La ley requiere justicia, y ésta el pecador debe a la ley; pero él es incapaz de presentarla. La única manera en que puede alcanzar la justicia es por la fe. Por la fe puede él presentar a Dios los méritos de Cristo, y el Señor lanza la obediencia de Su Hijo a crédito del pecador. La justicia de Cristo es aceptada en lugar del fracaso del hombre, y Dios recibe, perdona, justifica al alma arrepentida y creyente, la trata como si fuese justa y la ama tal cual ama a Su Hijo. Así es la fe imputada como justicia; y el alma perdonada avanza de gracia en gracia, de una luz para una luz mayor...

Si los seguidores de Cristo tuviesen fe genuina, con humildad y amor, ¡qué obra podrían realizar! ¡qué fruto se vería para gloria de Dios! La Maravillosa Gracia de Dios: 263.

"Si queréis salir incólumes del tiempo de angustia, debéis conocer a Cristo y apropiaros del don de Su justicia, la cual imputa al pecador arrepentido". Review and Herald, 22-11-1892.

"Las pruebas son los operarios de Dios, permitidas para la perfección del carácter. Se me ha mostrado que en lo futuro veremos cuán íntimamente estaban relacionadas nuestras pruebas con nuestra salvación, y cómo esas leves tribulaciones produjeron para nosotros "un cada vez más excelente y eterno peso de gloria"". 6T: 1099; 7A: 321; Carta 5, 1880.

"Examinaos a vosotros mismos, para ver si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos? ¿No sabéis que Jesucristo está en vosotros? ¡A menos que estéis reprobados!" 2 Cor. 13:5.

"Los que no tienen tiempo para prestar atención a su propia alma, para examinarse diariamente a sí mismos y saber si están en el amor de Dios y colocarse en el cauce de la luz, tendrán tiempo para ceder ante las sugestiones de Satanás y la ejecución de sus planes. Satanás se insinuará mediante cuñitas que se agrandarán a medida que se abran paso. Las engañosas trampas de Satanás serán introducidas en la obra especial de Dios en este tiempo". 6T: 1107; 7A: 329; MS 16, 1890.

"La vieja naturaleza, nacida de sangre y de la voluntad de la carne, no puede heredar el reino de Dios. Debe renunciarse a los viejos caminos, las tendencias hereditarias, los antiguos hábitos, pues la gracia no se hereda. El nuevo nacimiento consiste en tener nuevos motivos, nuevos gustos, nuevas tendencias. Los que han sido engendrados por el Espíritu Santo para vivir una vida nueva, han llegado a ser participantes de la naturaleza divina, y en todos sus hábitos y prácticas demostrarán su relación con Cristo. Cuando los hombres que pretenden ser cristianos retienen todos sus defectos naturales de carácter y de genio, ¿en qué se diferencia su actitud de la de los mundanos? No aprecian la verdad como santificadora y refinadora. No han nacido de nuevo". 6T: 1101; 7A: 323; Review and Herald, 12-04-1892.

"El hombre ha sido separado de la vida de Dios por el pecado. Su alma está paralizada por las intrigas de Satanás., el autor del pecado. El hombre es incapaz por sí mismo de percibir el pecado, incapaz de apreciar la naturaleza divina y hacerla suya. Si ésta fuera colocada a su alcance, en ella no habría nada que deseara el corazón natural del hombre. Sobre él está el poder seductor de Satanás. Todos los ingeniosos subterfugios que puede sugerir el diablo son presentados ante su mente para impedir todo buen impulso. Cada facultad y atributo dado al hombre por Dios ha sido usado como un arma contra el benefactor divino. De modo que aunque Dios lo ama, no puede impartirle, sin correr peligro, los dones y las bendiciones que desea prodigarle". 6T: 1099; 7A: 321; MS 50, 1900.

"Cuando el alma es puesta en estrecha relación con el gran Autor de la luz y la verdad, se producen en ella impresiones que revelan su verdadero estado ante Dios. Entonces morirá el yo, será derribado el orgullo y Cristo dibujará Su propia imagen en el alma con líneas más profundas". 6T: 1099; 7A: 321; MS 1A, 1890.

"Cuando Cristo es más amado que el yo, la belleza de la imagen del Salvador se refleja en el creyente... Cristo será reflejado en el carácter sólo cuando el yo sea colocado sobre el altar del sacrificio. Cuando el yo sea sepultado y Cristo ocupe el trono del corazón, habrá una revelación de principios que limpiará la atmósfera moral que rodea el alma". 6T: 1098; 7ª: 320; Carta 108, 1899.

"Enoc siempre mantuvo al Señor delante de sí, y la Palabra inspirada dice que "caminó con Dios". Hizo de Cristo su compañero constante. Estaba en el mundo y cumplía sus deberes para con el mundo, pero estaba bajo la influencia de Jesús. Reflejaba el carácter de Cristo, exhibiendo las mismas cualidades de bondad, misericordia, tierna compasión, simpatía, indulgencia, mansedumbre, humildad y amor. Su compañía con Cristo día tras día lo transformó a la imagen de Aquel con quien estaba tan íntimamente relacionado. Día tras día crecía alejándose de su propio camino y penetrando en el camino de Cristo, el celestial, el divino, en sus pensamientos y sentimientos. Continuamente preguntaba: ¿Es éste el camino del Señor? El suyo era un crecimiento constante, y tenía comunión con el Padre y el Hijo. Esta es santificación genuina". 6T: 1097-1098; 7A: 319-320.

"Los que desean participar de los beneficios de la mediación del Salvador, no deben permitir que ninguna cosa interfiera con su deber de perfeccionar la santidad en el temor de Dios". CS: 527-528.

"Y les di también mis Sábados, para que fueran por señal entre Yo y ellos, para que supieran que Yo soy Jehová que los santifico". Eze. 20:12.

"Por lo tanto, el Sábado es una señal del poder de Cristo para hacernos santos. Y es dado a todos cuantos Cristo santifica. Como señal de Su poder santificador, el Sábado es dado a todos cuantos, por medio de Cristo, se tornan parte del Israel de Dios". La Fe Por La Cual Vivo: 33.

"No debemos pensar en Dios como deseando punir el pecador por causa de su pecado. El propio pecador es quien atrae la punición sobre sí. Sus propios actos generan una serie de circunstancias que alcanzan un resultado definido. Cada acto de transgresión recae sobre el pecador, operando en él un cambio de carácter y facilitando el pecar de nuevo. Escogiendo el pecado, el hombre se separa de Dios, se coloca fuera del canal de bendiciones y el resultado cierto es la ruina y la muerte.

Por la obediencia a esta ley, el intelecto es fortalecido, la conciencia es iluminada y se vuelve sensible. La juventud necesita obtener una clara comprensión de la ley de Dios". La Fe Por La Cual Vivo: 84.

La influencia espontánea e inconsciente de una vida santa es el más convincente sermón que se puede hacer en pro del cristianismo. El argumento, aun cuando sea irrespondible, puede sólo provocar oposición; pero el ejemplo piadoso tiene un poder al cual es imposible resistir completamente". HAp: 511.

"Nuestra vida puede parecer enredada, pero al confiarnos al Maestro, Él desentrañará el modelo de vida y carácter que sea para Su propia gloria. Y ese carácter que expresa la gloria, el carácter de Cristo, será recibido en el paraíso de Dios. Todo el que cumpla por fe los mandamientos de Dios, alcanzará el estado de impecabilidad en que vivía Adán antes de la caída". Maranata: 222.

"Vuestra parte es poner vuestra voluntad al lado de Cristo. Al someter vuestra voluntad a la Suya, Él inmediatamente se aposa de vosotros, y os lleva a querer y a hacer Su voluntad. Vuestra naturaleza es puesta bajo el control de Su Espíritu. Vuestros propios pensamientos están sujetos a Él. Si no podéis dominar vuestros impulsos y emociones como deseáis, podéis dominar la voluntad, y así se operará en vuestra vida un cambio completo. Al someter vuestra voluntad a Cristo, vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. Ella es aliada del poder que está sobre todos los principados y potestades. Tenéis una fuerza proveniente de Dios que os mantiene apegado a Su fuerza; y una nueva vida, aun la vida de la fe, os es posible tener.

Nunca podréis tener éxito en elevaros a vosotros mismos, a menos que vuestra voluntad esté al lado de Cristo, cooperando con el Espíritu de Dios. No penséis que no podéis, sino que decid: puedo, seré. Y Dios prometió Su Espíritu Santo para ayudaros en todo esfuerzo decidido". La Maravillosa Gracia De Dios: 207.

"La intercesión de Cristo en el santuario celestial, en pro del hombre, es tan esencial al plano de la salvación, como lo fue Su muerte sobre la cruz. Por Su muerte inició esa obra, para cuya terminación ascendió al cielo, después de resurgir.

Si los que esconden y disculpan sus faltas pudiesen ver cómo Satanás exulta sobre ellos, cómo escarnece de Cristo y de los santos ángeles, debido al procedimiento de ellos, se apresurarían a confesar sus pecados y a dejarlos. Mediante los defectos de carácter, Satanás trabaja para obtener el dominio de toda la mente, y sabe que, si esos defectos son acariciados, él tendrá éxito. Por lo tanto, está constantemente tratando de engañar a los seguidores de Cristo con su fatal sofisma de que les es imposible vencer. Nadie, pues, considere incurables sus defectos. Dios dará fe y gracia para vencerlos... En todo el poderío satánico no hay fuerza para vencer una única alma que se rinde confiante a Cristo". La Fe Por La Cual Vivo: 203.

"El Espíritu de Dios no puede venir en nuestro auxilio, y ayudarnos en el perfeccionamiento del carácter cristiano, mientras condescendamos con los apetitos que perjudican la salud". Counsels On Diet And Foods: 57.

"Acrecentad a vuestra fe la virtud". 2 Pedro 1:5. "No hay ninguna promesa para aquel que es retrógrado. En su testimonio, el apóstol visa estimular los creyentes al adelanto en gracia y santidad. Ellos ya profesan vivir la verdad, tienen cierto conocimiento de la preciosa fe, fueron hechos participantes de la naturaleza divina. Pero si se detienen ahí, pierden la gracia recibida...". La Maravillosa Gracia de Dios: 239.

"La genuina santificación no es otra cosa sino una muerte diaria del yo y una conformidad diaria para con la voluntad de Dios". Mi Consagración Hoy: 248.

"Pocos, si, solamente pocos del inmenso número de los que pueblan la tierra serán salvos para la vida eterna, al paso que las multitudes que no perfeccionaron el alma en la obediencia de la verdad serán destinadas a la segunda muerte". 2T: 401-402.

"Enséñense a los jóvenes y a los niños a escoger para sí aquella vestidura real tejida en los telares celestiales – el "lino puro y resplandeciente" (Apoc. 19:8), que todos los santos de la Tierra usarán. Ese vestido, el propio carácter inmaculado de Cristo – es libremente ofrecido a todo ser humano. Pero todos los que lo reciben, lo recibirán y usarán aquí". La Fe Por La Cual Vivo: 275.

"Para trabar con éxito el combate contra el pecado, tenéis que permanecer bien junto a Jesús. No habléis en incredulidad; no tenéis disculpa para hacer eso. Cristo hizo por vosotros un sacrificio completo, para que pudieseis subsistir delante de Dios, completos en Él. Dios no se agrada con nuestra falta de fe. La incredulidad siempre separa de Cristo al alma.

No es digno de loor hablar de nuestras debilidades y desalientos. Diga cada cual: "Siento mucho haber cedido a la tentación, y por ser tan débiles mis oraciones, tan débil mi fe. No tengo disculpa para presentar, por ser un enano en la vida religiosa. Trato, sin embargo, de alcanzar la perfección de carácter en Cristo. Pequé, pero amo a Jesús. He caído muchas veces, y sin embargo Él ha extendido la mano para ayudarme. Le he dicho todo acerca de mis errores. Con vergüenza y tristeza he confesado el haberlo deshonrado. He mirado hacia la cruz, diciendo: todo eso sufrió Él por mí. El Espíritu Santo me ha mostrado mi ingratitud, mi pecado de exponer a Cristo al vituperio. Aquel que no conoce pecado me perdonó. Él me llama para una vida más elevada, más noble, y yo avanzo para las cosas que están delante de mí". Review and Herald, 10-03-1904; En Los Lugares Celestiales: 276.

"Sólo entrarán en el Cielo los que, en el tiempo de prueba, hayan formado un carácter que respire una influencia celestial. El santo en el Cielo tiene que ser primero santo en la Tierra". Mi Consagración Hoy: 273.

"Toda sincera petición de gracia y fortaleza será atendida... Pedid a Dios que haga por vosotros aquellas cosas que no podéis hacer por vosotros mismos. Contadle todo a Jesús. Abridle los secretos de vuestro corazón; pues Sus ojos perscrutan los más íntimos secretos del alma, y Él os lee los pensamientos como un libro abierto. Al haber pedido las cosas necesarias para el bien de vuestra alma, creed que las recibiréis, y las tendréis...

No piensen los jóvenes que pueden vivir una vida descuidada e indulgente, no buscando la preparación para el reino de Dios, y después en el tiempo de prueba poder permanecer firmes al lado de la verdad. Necesitan procurar fervorosamente, para su vida, la perfección que se observa en la vida del Salvador, de manera que, cuando Cristo venga, ellos estén preparados para entrar por los portones a la ciudad de Dios. El abundante amor de Dios y Su constante presencia en el corazón darán el poder del dominio propio, y amoldarán y perfeccionarán la vida y el carácter". La Maravillosa Gracia de Dios: 276.

"El que verdaderamente cree en Cristo, se vuelve participante de la naturaleza divina, y tiene fuerza de la cual se puede valer bajo cualquier tentación. No caerá bajo la tentación, ni será dejado a fracasar. En el tiempo de la prueba, él apelará para las promesas, y por ellas escapará de las corrupciones que por la concupiscencia hay en el mundo...". Mi Consagración Hoy: 274.

Iglesia Adventista del Séptimo Día de Pajaritos

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